El trabajo, el colegio de los niños, las facturas, la incertidumbre sanitaria...
Van enterrando poco a poco ese sueño, propósito u objetivo hasta que acaba desapareciendo.
Un año más, un sueño más sin cumplir, un decepción más.
Y lo peor de todo esto es que, si darte cuenta, con cada sueño incumplido, con cada propósito que se ha quedado por el camino, también se ha quedado una parte de ti.
Cada vez te identificas menos con la personas que quería ser.
Ese foco que en el paso tenías puesto en ti, ahora está situado en tus hijo, en tu pareja, en tus padres, en ese trabajo que te asfixia...
Pero, ¿qué pasa contigo?
¿Cuánto tiempo hace que no te centras en ti y en tus propósitos?
Para reconectar contigo, con tus metas y para tener ese foco, determinación y apoyo que te permita lograrlos.
Para ayudarte a lograr definitivamente todos tus objetivos y entrar a formar parte del 8% de personas que los cumplen hemos creado Inmersión.